Migración: Trámite fraudulento de doble nacionalidad perjudica a joven de Tetlanohcan

La errónea asesoría jurídica proporcionada  para realizar el trámite  de  obtención de  la doble nacionalidad,  generó una serie de problemas a una familia de Tetlanohcan. Tener doble   nacionalidad trae como beneficio el  acceso a derechos en ambos países, como: al trabajo, a la salud, a la propiedad,  programas sociales, becas,  contar  con  dos pasaportes para viajar libremente.

Pero ¿Qué pasa cuando el procedimiento nunca se realizó y en su lugar se hizo un trámite inadecuado?

En entrevista para el Colectivo por una Migración sin Fronteras, el padre de familia contó que estuvo unos años en Los Ángeles, pero tuvo que regresar a México porque tenía más familia acá. Ante esto, trajo a su hijo de cinco meses,   “de mi hijo nada más nos trajimos su acta de nacimiento y su número de  seguro, pero no contaba   con pasaporte americano”.

De doble nacionalidad a doble identidad

Cuando llego el momento de  inscribirlo al nivel inicial de educación, le pedían su  acta de nacimiento mexicana y su CURP, la cual solo se obtiene,  una vez que se cuenta con la doble nacionalidad, o al menos presentar el acta americana con apostilla y traducida por perito oficial.

Con el objetivo de tener estos papeles, el señor acudió al Registro Civil  de Tetlanohcan, en donde,  en lugar de orientarlo sobre como obtener la doble nacionalidad, para lo cual se requiere entregar el acta de nacimiento americana con apostilla y traducida por perito oficial;  lo que hicieron ya sea  por desconocimiento o por  una mala práctica, fue registrar al niño como si hubiera nacido en Tlaxcala, entregándole el acta de nacimiento mexicana.

“Fue hasta cuando mi hijo  empezó a realizar su proceso para ingresar a la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UATx), como ya son documentos federales, decidieron que su hijo presentará el acta de nacimiento americana, pero al presentarse con este documento, le pidieron su doble nacionalidad y su CURP, entregamos entonces  el acta mexicana que pensábamos era la que certificaba la doble nacionalidad, pero no nos recibieron estos papeles”.

“ Nos  cuestionaron como habíamos obtenido este documento, no lo recibieron y nos enseñaron los de otros estudiantes que si habían realizado este trámite y ahí nos dimos cuenta de que la documentación de sus compañeros era diferente a la de mi hijo”.

Para ese momento, se dieron cuenta de que su hijo no contaba con la doble nacionalidad; pero sí con dos identidades,  lo que podía traer consecuencias legales, incluso considerarlo un delito.

“En su momento, nos confiamos de la gente y la inexperiencia de uno también. Entonces ya  viendo los documentos de otras personas pues ahora sí que nos entró esa inquietud de checar, y fuimos realistas”.

La asesoría correcta

Después de no ser aceptado en la universidad por su documentación, acudieron a la embajada de los  Estados Unidos, donde les proporcionaron la información adecuada sobre el  procedimiento que debían seguir, sugiriéndoles alternativas, podían hacerlo de manera electrónica o buscar a una persona que les sacara la apostilla del acta americana, “Lo que nos recomendaron, los de la embajada, que llegando la apostilla,  ir posteriormente con un perito traductor, hiciéramos lo de la doble nacionalidad y hacer un juicio para anular el acta mexicana”.

Empezó la verdadera odisea de trámites. Tras la mala asesoría jurídica que tuvo esta familia tlaxcalteca para obtener la doble nacionalidad, fueron a varias partes para asegurarse de que ahora si estaban bien informados y no cometer un error más.

En ese camino se han encontrado con personas que les cobran cantidades fuertes de dinero para apoyarlos. “Estamos limitados y estamos tratando de buscar a dónde más nos convenga y se hagan las cosas como se deben de hacer y ya no caer en las manos de tanta gente así, que no tiene escrúpulos; que se quiere beneficiar de gente que no sabe”.

Afortunadamente, una amistad de años de la familia al enterarse de todo lo que ha pasado por ese mal procedimiento,  se propuso como voluntario para hacer el trámite de la apostilla en los Ángeles  y encargarse de todo ese trámite de manera adecuada.

Las consecuencias de tener dos identidades

El joven al momento de recibir  la asesoría en el consulado de Acapulco, para pedir su pasaporte americano, se enteró que no tenía bien la doble nacionalidad y que corría el riesgo de perderla por el acta mexicana que le habían realizado.

“Realmente uno si se siente mal porque de un momento a otro,  pues te niegan diferentes cosas por  el hecho de no tener la doble nacionalidad y es muy desgastante; es una pérdida de tiempo y desgaste económico”

También, comenta que, como vía fácil paso por su mente regresar a Estados Unidos ante todo el problema que generó este procedimiento. Sin embargo, esta consiente de todo lo que conlleva esto.

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